Como hombres sabemos que, los machitos de los aparatos represivos del Estado colombiano (policía y ejército nacional), han tatuado con sangre, en nuestros cuerpos masculinos la palabra vergüenza. Los vejámenes sistemáticos realizados por estos “hombres” contra las mujeres, siguen manchando para siempre nuestra hombría, clamando nuestra más profunda movilización contra todos esos actos deshumanizantes. En primera medida, nos movilizamos en apoyo total a las víctimas de estos crímenes; en segundo lugar apoyar la denuncia y movilización de esta gran marcha feminista y; en tercer lugar, para exigir el castigo inmediato a los hombres e instituciones que han permitido que la barbarie se ciña sobre las mujeres.
Como hombres sabemos que la violación o agresión sexual a una mujer, no responde a un apetito sexual desenfrenado, ni a una anomalía cerebral de un individuo, sino a la violencia de género planeada y auspiciada desde las estructuras del poder, que en el caso del ultraje ejercido contra una niña payanesa, es orientado desde las instituciones castrenses con la anuencia de los organismos de control público, el silencio cómplice del poder ejecutivo y la impunidad del legislativo, con el fin de ejercer un control sobre los cuerpos y todo el territorio de la feminidad expresada en las calles al grito del paro nacional .
Igualmente, como hombres, sabemos que el machismo y su misoginia es un flagelo que debemos erradicar de cualesquiera de nuestras prácticas cotidianas, para iniciar a construir unas relaciones de poder, que desaparezcan de una vez por todas, el ejercicio de vejaciones, como las que el ESMAD sometió a la niña payanesa, hasta llevarla a un presunto suicidio, una forma de grítale al mundo que ante este vejamen, no había forma de seguir existiendo, ya que los ejecutores, eran los que supuestamente estaban para protegerla; quedando claro, que al final es otro crimen de estado, en el marco del estallido social y la sistemática violencia contra las mujeres.
Nuevas Masculinidades, Movimiento Político y Social por el buen vivir
En Red Podemos
Fotografía: Juan Cuenca Fotografía Independiente
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