Ibagué sin agua e insegura se alista para las fiestas folclóricas

|Por Nelson Lombana Silva|

Si hay algo que ha caracterizado la actual administración municipal de la ciudad de Ibagué, capital del departamento del Tolima, que preside el señor Luis H. Rodríguez, es la continua carencia del preciado líquido en todos los barrios. Pareciera una campaña debidamente organizada y proyectada con el fin de “justificar” la privatización de la empresa de acueducto y alcantarillado, IBAL.

Primero se dijo con gran aspaviento que era por el intenso invierno, ahora que esta haciendo intenso verano, ¿Qué cuento chino traerá entre manos el señor Bejarano? Porque la ausencia del preciado líquido se sigue notando en amplios sectores de la ciudad musical de Colombia, Ibagué.

Bajo un silencio – casi sepulcral –  de la mayoría de los medios de comunicación, por aquello de la gorda publicidad de la parranda llamada “fiestas folclóricas”, los casi 500 mil habitantes más los turistas se ven metidos en una realidad compleja de no tener agua para calmar la sed y quitar el sudor del calor intenso que estamos viviendo por estos días.

Empero, esto no es todo. Hay que sumarle la inseguridad. Todos los días están asesinando personas anónimas o líderes comunitarios en los distantes barrios y en el mismo centro, en medio de la monumental presencia de policía y agentes secretos por todas partes. Anoche, un tendero del barrio El Topacio, fue asesinado a sangre fría a las 8:30 de la noche en medio de un concejal que estaba haciendo politiquería y un grupo numeroso de comunidad. Según la presidenta de la junta de acción comunal, fue una muerte anunciada, porque hacía tres meses los delincuentes intentaron robarlo, él había puesto la denuncia del riesgo que corría pero las autoridades nunca colocaron atención.

El concejal de marras que estaba presente en el momento del sicariato, señaló que los tres jóvenes que cometieron el crimen salieron caminando como si nada hubiera pasado por entre la comunidad que estupefacta solo atinó a mirarlos.  Con las armas en la mano se fueron sin que nadie reaccionara. El miedo tiene tomado a la ciudad de Ibagué, no hay duda. La disculpa la misma: En esos momentos la policía estaba atendiendo un caso en otro lugar.

A pocas horas de comenzar el holgorio, el “festival folclórico” con reinas, desfiles, licor y guacherna, la ciudad se debate en la miseria, el desempleo y la inseguridad. Todos los días atracan a cualquier hora del día y de la noche. Mientras esto sucede, la mayoría de medios de comunicación no paran de anunciar como chicharras las fiestas con publicidad subliminal y costosa. Se vende por la tercera la programación y algunos incautos sueñan con aprovecharlas para conseguir algún centavo para llevar algo a sus hogares. Las calles parecen caminos de herradura.

Ibagué seca e insegura, pero, ¡Qué vivan las fiestas! ¡Qué viva el folclor! ¡Qué vivan las reinas!

Ibagué, junio 19 de 2012

Publicar un comentario

0 Comentarios