|Catedráticos UT| “Así estamos: consternados, rabiosos”

“No creo que seamos parientes muy cercanos, pero si Ud. es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, somos compañeros, que es más importante” [Ernesto Guevara de la Serna]

|Por Argemiro Rojas|
La suspensión automática del contrato a los catedráticos de la Universidad del Tolima, adoptada el 27 octubre de 2011 por parte de las Directivas Académicas en asocio con tres Asesores Jurídicos, no sólo es una práctica ilegal que atenta contra la triple naturaleza constitucional del DERECHO AL TRABAJO (valor, principio y derecho), sino que además presenta las dos caras de la institución universitaria que, utilizando SOFISMAS DE DISTRACCION, en teoría dice rechazar la Reforma a la Ley 30 y en la práctica NO exige al Estado la adjudicación de los recursos presupuestales para garantizar la educación de las presentes y futuras generaciones.

Es claro que en el contexto de crisis de la educación colombiana, caracterizado tanto por su carácter excluyente y elitista como por la aplicación de la neoliberal Ley 30, promover o secundar el cierre de espacios de discusión y participación democrática, se convierte en otra forma de evitar que el inconformismo social se transforme en movilización ciudadana, lo que a todas luces no es más que la criminalización de los movimientos universitarios y populares.

Ante ésta situación, que atenta contra el ejercicio de las libertades y autonomías democráticas de cerca del 80% del personal docente de la modalidad presencial de la Universidad del Tolima, debemos pasar de la contemplación pasiva a la indignación generalizada y reclamar que uno de los principios motores del sindicalismo mundial, la solidaridad, se haga efectivo a favor de nuestros compañeros catedráticos y en defensa de la “última” institución superior de carácter público estatal de la región tolimense.

De igual forma, atendiendo el llamado de los compañeros de ASPU de la Universidad Francisco José de Caldas, en su defensa de la Sentencia C-614/09 de la Honorable Corte Constitucional, exigimos la dignificación del ejercicio docente en igualdad de condiciones y con plenas garantías contractuales, y rechazamos toda decisión de los organismos directivos de la Universidad del Tolima que, por vía del “congelamiento” a catedráticos, pretenda desarticular el movimiento estudiantil, el cual, desde hace varias semanas, asumió la Asamblea Permanente como escenario de comunicación y discusión, de decisión y de acción en defensa de la educación universitaria de los tolimenses y colombianos.

En el mismo sentido, y en atención al Informe 355 de la Organización Internacional del Trabajo que ordenó al Gobierno colombiano solucionar el conflicto suscitado por los descuentos salariales contra los maestros por el paro de 2001, exhortamos a ASPU TOLIMA a presentar una querella ante El Comité de Libertad Sindical de la OIT (tal como lo hizo FECODE, el 22 de mayo del año 2008), con el fin de defender la dignidad contractual de los catedráticos UT y encender la alerta naranja ante cualquier tipo de amenaza, chantaje y persecución contra los docentes que participan del movimiento universitario contra la Ley 30.

Ibagué, mes de la Resistencia Universitaria contra la Ley 30.

http://www.fecode.edu.co/images/CircularesPDF/OIT%20SOBRE%20DESCUENTOS%20DOCENTES%20PORPARO2001.pdf